Con la llegada del invierno y las bajas temperaturas, es fundamental prestar especial atención al cuidado de nuestra piel. El frío extremo puede causar estragos, como sequedad, irritación e incluso agrietamientos si no la cuidamos adecuadamente. Por ello, en este artículo de Lida te explicamos el efecto del frío en la piel y te daremos algunos consejos prácticos para protegerla, con un enfoque especial en los productos de glicerina de Lida, que son un aliado perfecto para mantener tu piel hidratada y protegida incluso en los días más fríos. ¡Vamos allá!

¿Cómo afecta el clima de frío a tu piel?

El frío y la piel no suelen ser precisamente buenos amigos. Durante el invierno, el aire frío y seco, combinado con los vientos fuertes y el uso de calefacción en interiores, puede deshidratar nuestra piel rápidamente. Además, el cambio de temperatura constante entre el interior y el exterior, junto con una menor producción de grasa natural por parte de la piel, puede empeorar estos efectos.

Uno de los principales problemas que tenemos en climas fríos es la deshidratación. El aire seco roba la humedad de nuestra piel, lo que provoca que se vuelva áspera, escamosa e incluso dolorosa. Esto se debe a que la barrera protectora natural de la piel se debilita, haciéndola más susceptible a la pérdida de agua. 

Otro efecto común es la irritación, pues el viento y el frío pueden desencadenar enrojecimiento y sensibilidad en la piel, especialmente en las zonas más expuestas como las mejillas, la nariz y los labios. Estas áreas son más propensas a agrietarse o desarrollar pequeñas heridas si no se les presta la atención adecuada.

Aunque el frío en la piel es el principal culpable en esta época del año, también debemos considerar que, en climas más cálidos, la piel necesita cuidados distintos. Por ejemplo, en verano solemos enfrentarnos a un exceso de sudoración y exposición solar, que puede causar quemaduras y envejecimiento prematuro si no utilizamos productos adecuados para protegernos del sol. 

Consejos para proteger tu piel en climas extremos

Afortunadamente, con unos simples pasos podemos mantener nuestra piel protegida y saludable durante todo el invierno:

• Hidratarse por dentro y por fuera: beber suficiente agua es crucial para mantener la piel hidratada desde el interior. Aunque en invierno solemos sentir menos sed, es fundamental no descuidar nuestra ingesta de líquidos. También es importante usar cremas hidratantes ricas en ingredientes que ayuden a retener la humedad en la piel.
• Utiliza productos con glicerina: es un ingrediente estrella cuando se trata de proteger la piel en climas fríos. Se trata de un humectante natural que atrae y retiene el agua en la piel, ayudando a que esta se mantenga hidratada por más tiempo. Los productos de glicerina de Lida son perfectos para esta tarea, ya que ofrecen una hidratación duradera y profunda, protegiendo incluso las pieles más sensibles.
• Evita duchas muy calientes: aunque son muy tentadoras en invierno, el agua a altas temperaturas puede eliminar los aceites naturales de nuestra piel, dejándola aún más seca. Es recomendable utilizar agua tibia y limitar el tiempo bajo la ducha para minimizar este impacto.
• Protege las zonas más expuestas: las manos, la cara y los labios son las áreas más expuestas al frío de la piel. Usa guantes, bufandas y un buen bálsamo labial para proteger estas zonas de los efectos del viento y las bajas temperaturas.
• Aplica protector solar, incluso en invierno: aunque no lo creas, el sol también puede dañar la piel durante el invierno, especialmente cuando los rayos se reflejan en la nieve o el hielo. Por ello, aplica un protector solar de amplio espectro cada mañana antes de salir de casa.
• Usa humidificadores en interiores: la calefacción tiende a secar el aire en nuestros hogares, lo que contribuye a la sequedad de la piel. Un humidificador puede ayudar a mantener un nivel adecuado de humedad en el ambiente, previniendo que la piel se deshidrate.

Productos de glicerina de Lida, tu aliado en climas extremos

Cuando hablamos de hidratar y proteger la piel en condiciones extremas, los productos de glicerina de Lida destacan como una solución eficaz y accesible. La glicerina es conocida por su capacidad para atraer y retener la humedad en la piel, y los productos de Lida están formulados para ofrecer una protección ante el frío de la piel:

• Jabón de manos: sirve para nutrir y cuidar la piel de las manos, proporcionando una capa extra de hidratación para lucir una piel perfecta.
• Jabón de ducha: consigues una hidratación extra sin temor a picores o reacciones adversas, ya que tiene una fórmula natural sin compuestos químicos.
• Pastillas de jabón: tienen una fórmula tradicional que hidrata y cuida la piel de rostro y manos gracias a la glicerina.

Cuida tu piel incluso en los días más fríos

El frío y la piel no se llevan bien, pero con los cuidados adecuados y productos eficaces, como los de glicerina de Lida, podemos mantenerla protegida e hidratada incluso en las condiciones más extremas. Siguiendo estos consejos y adaptando tu rutina de cuidado a las necesidades de tu piel durante el invierno, podrás prevenir los efectos del frío en la piel. ¡No olvides mimarla!